La Policía surcoreana dice que los hackers norcoreanos han robado más de 40.000 documentos relacionados con la defensa, incluidos cianotipos de las alas de los cazabombarderos F-15.

El material robado es resultado de una serie de ciberataques masivos comenzados en 2014 y detectados en febrero de 2016 después de que los piratas informáticos norcoreanos accedieran a la información de dos grandes grupos surcoreanos, incluido material e información relativos a la defensa, afirmó el lunes la unidad de investigación cibernética de la Policía.

Aunque no fue confirmado por la Policía surcoreana, varios medios de comunicación locales han apuntado que los dos grupos que sufrieron el ciberataque son SK y Haljin. No obstante, un funcionario del Ministerio de Defensa de Corea del Sur aseguró que ninguno de los materiales robados fue clasificado.

Según el informe, una dirección IP localizada en Pyongyang, capital norcoreana, realizó el robo masivo de información y su objetivo era un software de gestión de red, ampliamente utilizado por empresas privadas y agencias gubernamentales.

Fuentes surcoreanas también, revelaron que la dirección IP era idéntica a la empleada en un ciberataque en 2013 contra bancos y emisoras de radio en Corea del Sur que bloqueó los sistemas de los ordenadores durante más de una semana. Seúl acusó en aquel entonces a Pyongyang, y éste por su parte rechazó cualquier implicación en el caso.

Un pirata informático.

En sus investigaciones, la Policía ha detectado ciberataques (desde el Norte) contra más de 140.000 ordenadores de 160 compañías surcoreanas y agencias del Gobierno, a fin de introducirles un código malicioso con el objetivo de realizar un masivo robo informático en el futuro.

Todo ocurre en momentos de alta tensión en la península coreana, que vive inmersa en una escalada de retórica militar desde la guerra de Corea (1950-1953). Al final del conflicto no se firmó ningún acuerdo de paz, por lo que las dos Coreas permanecen técnicamente en guerra.

La tensión en la península de Corea se agravó tras la cuarta prueba nuclear de Pyongyang en enero y su lanzamiento un mes después de un satélite a bordo de un misil espacial balístico, a lo que se añaden las maniobras militares conjuntasde Seúl y Washington. Ambos vecinos se acusan de actos provocativos.